Es natural -porque viene del espíritu de supervivencia y porque te dan seguridad- que en el primer estadio evolutivo consideras la riqueza y las posesiones materiales como necesidades primordiales. Afortunadamente para ti, gracias a la expansión cerebral y mental (cerebro límbico y neurocorteza), un día llegas a un grado de elevación espiritual que, en la búsqueda de la Felicidad Suprema, te empujas a mirar siempre más en tu interior, a conocerte a ti mismo, y a entender quién eres y por qué existes…
Porque la tendencia de la mayoría se vuelve norma para todos (Mira: Dos Tipos de Locos), el imaginario colectivo ha creado la visión del espiritualista pobre pero honesto, y del rico avaro y deshonesto. ¡No estoy de acuerdo con esa creencia! Opto por los dos porque, con la ideación correcta, la una no excluye la otra.
Prefiero un espiritualista que, sin perder su Meta principal, sea capaz de producir riqueza que -además de llevar bienestar a su familia- usará para el Servicio y el crecimiento de la sociedad. Tampoco pienso que todos van a actuar como misioneros, pero sí pienso que todos tenemos el deber -y el privilegio- de servir y de contribuir al crecimiento de nuestra Familia Universal.
Claro está que controlar la riqueza es como jugar con el fuego, y es por eso que los Sabios y Maestros de todos los tiempos siempre han, y justamente, alertado sobre ese peligro. Yo mismo soy testigo de cómo varios espiritualistas, aparentemente establecidos en las prácticas espirituales, se desplomaron al contacto con la riqueza y el poder, y de las tentaciones que venían con ellas. Mejor dicho, cualquiera se puede comprar un caballo padrón, brioso y arisco, pero eso no significa que será capaz de montarlo y domarlo.
Para ti ese caballo se llama ‘ego’.
Acumular sin dar es como colocar agua continuamente en un contenedor que, sin importar cuán grande sea, un día se llenará. ¿Y qué pasa si se queda lleno por un tiempo? Su agua se estancará y empezará a oler mal. Así que si quieres continuar recibiendo agua fresca deberás dar parte de tu contenido. Es por este motivo que quien es egoísta -que se llena siempre más sólo pensando en sí mismo- está con la obsesión de tener más y más y que, aunque lleno de riqueza, nunca se llena y nunca está, ni estará satisfecho. Un día, agarrándose a su amado dinero, deberá dejarlo todo para siempre…
Y es también por esto que quien evoluciona espiritualmente, SABE que debe dar. DAR y SERVIR, a parte de las prácticas de auto-realización (que también son parte del Servicio), es lo más importante que un ser humano -digno se ser llamado así- puede hacer.
Has aceptado, aguantado y sufrido miles de horas [entre 25 y 35.000 en 14 y 20 años] del proceso educativo formal. Has ciertamente aprendiendo mucho, útil e inútil, pero no te han enseñado sobre tu bienestar integral, sobre el propósito primordial de tu existencia, ni la manera de llegar a esa Felicidad Suprema.
Eres y representas la expresión, belleza y complejidad de tu ser…humano. Cuando entiendes que algo, alguien, o alguna enseñanza puede ayudarte a expandir tu mente, a entender y a entenderte para llegar al Ser y a la Felicidad, lo quieres todo YA. Te entiendo, y somos iguales en eso.
¿Qué hacer?
Aprender lo que es el Dharma y hacer Dharma Pracár.
¿Qué es Dharma Pracár?
En el idioma Samskrta encontramos dos palabras que tienen un significado profundo y que estoy usando aquí porque no tienen una traducción en Castellano:
Dharma que significa naturaleza, deber, y característica esencial de una entidad (humano, animal, planta o cosa). Por ejemplo, la característica del fuego es quemar, la del agua mojar, la de los animales es comer, dormir, procrear, tener miedo. La característica del ser humano -además de compartir también aquellas de los animales- es ser feliz, Supremamente Feliz, y
Pracár [se pronuncia Praciar] que significa ‘La Propagación de la filosofía y de las prácticas espirituales’.
Las dos juntas significan “La Propagación de la filosofía y de las prácticas espirituales del Propósito Primordial del Ser Humano”.
¿Por qué hacer Dharma Pracár?
Hay sólo dos conocimientos: el que te lleva a la Felicidad Suprema y todo el resto, útil o vano que sea. ¡Saber elegir define tu ÉXITO!
En el primer tipo hay varias etapas. Debes estudiar constantemente para eliminar cualquier deficiencia que pueda nacer de creencias dogmáticas y miedos. Debes aprovechar de tales conocimientos para controlar tus ideas; a través de las preguntas superiores (aquellas que indagan y que te llevan a entender tu Propósito de Vida), lograr una consolidación de la ideología espiritual que te llevará a la entrega y a la unificación con el Ser Supremo.
En el segundo tipo de conocimiento, el conocimiento del mundo, se debe estudiar constantemente para eliminar cualquier deficiencia y así promover el bienestar universal. Al mismo tiempo, se debe usar un proceso racional de análisis para aprovechar tal conocimiento, y entonces buscar la manera de llevarlo al mundo práctico para que sea de beneficio a toda la humanidad.
Dharma Pracár significa transmitir enseñanzas valiosas para el crecimiento integral del ser humano, enseñanzas que considero maravillosas y que me han transformado desde que las conocí. Así que cuando yo te escribo, hablo e inspiro a entender y a mejorarte, estoy haciendo Dharma Pracár. Cuando tú transmites esa enseñanza a quien amas, estás haciendo Dharma Pracár. Dharma Pracár es la forma más alta de servir a los otros, sean ricos o pobres, e incluye a los animales porque es deber de los humanos -como hermanos mayores- amarlos y cuidarlos.
En mi caso, por suerte, destino, deseo del Grande o de mi buen Karma -aún haciendo errores y aprendiendo a golpes de la Vida- he sido y me considero MUY afortunado porque he recibido mucho.
¿Qué más puedo hacer ahora, sino dar?
Así que Dharma Pracár es mi Misión en la vida y, porque el propósito primordial del ser humano es alcanzar la Felicidad Suprema. Aunque eso puede parecer raro en el mundo espiritual, significa también luchar en contra de todo lo que impide ese logro, y esto incluye la lucha por la Justicia Social y la Liberación del Intelecto, el cuidar el planeta y todos sus habitantes.
Ese compromiso se transmuta en duro trabajo, sacrificio y dedicación hacia los demás. Para mí este mes termina la obra física de la Fundación Babanagar. ¡Todo está hecho! No hay deudas y la Fundación es dueña de la tierra y de todo lo que contiene. Ahora, a parte de velar por el mantenimiento del Hogar, me puedo dedicar, con mayor determinación, a llevar el conocimiento del Ser (lo que puedo y sé) al máximo número de personas.
¿Quién me ayuda en eso?
¿Qué puedes hacer tú?
Al inicio aprender, cuestionar, pensar, investigar, reflexionar para ver si lo que estás aprendiendo, además de ser lógico, racional y científico, te CONVENCE, y es lo tuyo. ¿Cómo lo sabes?
Pregunta a tu corazón, a tu lógica, a tu inteligencia, a tu intuición, a tu Ser, y te llegará la respuesta correcta. Si eso no pasa, debes RECHAZARLO y buscar en otro lugar.
Pero si piensas que este aprendizaje es importante y desinteresado -porque lo estás recibiendo sin dar nada a cambio- sentirás que tu ‘contenedor’ se está llenando, y sentirás el deseo de transmitir lo que te está ayudando y/o transformando.
Y en ese momento sentirás Amor que transformarás en el acto de Dar, porque Dar es un acto de Amor. Así que, porque amas, sentirás el deseo de compartir con los demás lo que es bueno para ti. Eso es Dharma Pracár, tu Dharma Pracár.
En el pasado la transmisión del ‘Propósito primordial de la vida (Dharma)’ era transmitido a un restringido número de discípulos que estaban listos a dejarlo todo por aprenderlo. Hoy, y porque la espiritualidad es amiga de la ciencia y del progreso, vamos a aprovechar las Redes Sociales. En este blog, en YouTube, en el grupo de Facebook, y en las demás Redes Sociales comentaremos enseñanzas que te ayudarán en tu progreso y crecimiento integral (físico, mental y espiritual). Aunque el cómo lograr la riqueza material no será meta de este grupo, si es necesario podremos también hablar de ella.
Mi visión y misión es la de encontrar y activar a las pocas ‘Perlas’ que quieren lograr la Felicidad Suprema y que están listas a emprender una doble lucha: hacia su expansión mental y Meta principal, y hacia el Servicio desinteresado a la Familia Universal.
PS – Quiero aquí aprovechar para agradecer a un grupo de chicos y chicas que con generosidad están donando parte de su tiempo para que, a través de las Redes Sociales, el Dharma Pracár pueda llegar a todos ustedes y contribuir a mejorar y/o transformar sus vidas.
Con cariño
Acerca del autor: Dada Japamantra
Motivador, profesor de meditación, líder humanitario, mentor y consejero espiritual. Centro mis actividades y existencia en el lema “Auto-realización y Servicio a la Humanidad.” Como monje y misionero, me dedico solamente a la misión de ayudar a las personas a desarrollar su Infinito potencial interior y a contribuir al bienestar universal.
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